“Las dietas no funcionan si no te enamoras de la comida que vas a comer” – Chef Katie Lee
¿Te encanta el sabor dulce y cremoso de la cheesecake, pero quieres cuidar tu figura y evitar el exceso de calorías? ¡Tenemos la receta perfecta para ti! Esta cheesecake sin horno es deliciosa, baja en calorías y fácil de preparar. ¡Sigue leyendo para descubrir cómo hacerla!
Esta cheesecake es perfecta como postre o para compartir en una reunión con amigos y familiares. Está hecha con ingredientes sencillos y saludables, como yogur griego sin grasa, queso crema bajo en grasa, miel y galletas integrales. ¡Y lo mejor de todo es que no necesitas encender el horno!
Una vez, una amiga estaba buscando una cheesecake baja en calorías para llevar a una cena de amigos y no encontraba ninguna que le gustara. Así que decidimos crear nuestra propia versión y esta receta fue el resultado. ¡Todos quedaron encantados y fue todo un éxito!
Ingredientes:
- 1 paquete de galletas integrales (150 gramos)
- 5 cucharadas de miel
- 1 taza de queso crema bajo en grasa (250 gramos)
- 1 taza de yogur griego sin grasa (250 gramos)
- 1 cucharada de esencia de vainilla
- 1 sobre de gelatina sin sabor
- 3 cucharadas de agua
- Frutas para decorar (opcional)
Cómo preparar Deliciosa cheesecake sin horno, baja en calorías:
- Tritura las galletas integrales en un procesador de alimentos o en una bolsa con ayuda de un rodillo hasta que queden hechas migas.
- Agrega 3 cucharadas de miel a las migas de galleta y mezcla bien. Luego, coloca la mezcla en la base de un molde desmontable y presiona con una cuchara para que quede compacta. Lleva el molde al refrigerador mientras preparas el relleno.
- En un bowl, mezcla el queso crema, el yogur griego, la esencia de vainilla y 2 cucharadas de miel hasta que quede homogéneo.
- En otro recipiente, mezcla la gelatina sin sabor con 3 cucharadas de agua y calienta en el microondas por 10 segundos. Revuelve bien hasta que la gelatina esté completamente disuelta.
- Agrega la gelatina disuelta a la mezcla de queso y yogur y mezcla bien.
- Vierte la mezcla sobre la base de galleta en el molde y lleva al refrigerador por al menos 2 horas, o hasta que esté firme.
- Decora con frutas y disfruta de tu deliciosa cheesecake sin remordimientos.
Esta cheesecake tiene un total de 1,200 calorías y si la dividimos en 8 porciones, cada una tendrá 150 calorías.
¿Y por qué tendría que comer esto mamá?
Imagina que te encuentras en una fiesta de cumpleaños y todos están comiendo pasteles y postres llenos de calorías. ¡Pero tú tienes en tus manos una deliciosa cheesecake que es baja en calorías y no te hará sentir culpable! Además, está hecha con ingredientes saludables como yogur griego, queso crema bajo en grasa y galletas integrales. ¡Es una opción deliciosa y saludable para cualquier ocasión!
A quién le gustaría esta receta
Al famoso chef y presentador de televisión Gordon Ramsay le encantaría esta cheesecake baja en calorías. Sabemos que a Ramsay le gusta comer saludable y mantenerse en forma, por lo que estamos seguros de que disfrutaría de esta deliciosa cheesecake sin remordimientos.
Algunas preguntas sobre Deliciosa cheesecake sin horno, baja en calorías:
¿Puedo hacer esta receta sin gelatina sin sabor?
No recomendamos omitir la gelatina sin sabor, ya que es lo que ayuda a que la cheesecake se mantenga firme sin necesidad de hornearla. Si no consigues gelatina sin sabor, puedes intentar usar gelatina de algún sabor que combine bien con la receta.
¿Puedo usar otro tipo de galletas en lugar de las integrales?
Sí, puedes usar galletas de otro tipo, pero asegúrate de que sean lo más saludables posible. Las galletas integrales son una opción excelente porque contienen más fibra y nutrientes que las galletas convencionales.
¿Puedo sustituir la miel por otro endulzante?
Sí, puedes usar otro endulzante como el azúcar de coco, la stevia o la miel de maple. Sin embargo, la miel es una opción saludable y natural que le da un sabor delicioso a la cheesecake.
¿Cuánto tiempo puedo conservar la cheesecake en el refrigerador?
La cheesecake se conserva bien en el refrigerador por hasta 3 días. Después de 3 días, la textura puede cambiar y ya no estar tan fresca.
